La Robamaridos


Al observar las estadísticas del blog la semana pasada, he notado que les agrada el machucado al corazón. Sí señores, les gusta leer más los post de temas amorosos que los simples o normales. Amor serrano causas, no hay otra forma de explicarlo.

Bajo un manto de fiebre la cual solo se presenta con escalofríos debido a la corta falda de la juerga que me metí el sábado (me subí a una silla a bailar y sana, con eso les digo todo) les hago entrega de este post el cual, básicamente, se trata de los benditos celos que te carcomen el cerebro mientras tu pareja está hablando con un/a amiguito/a. Ya un post pasado habíamos tratado los celos de amigos, los de siempre pero, carajo, cómo duele (obvio no duele pero si molesta) cuando eres tú la persona que está del otro lado.

Ser una persona anímicamente bien y con ganas de hacer amigos es algo característico en Grimenilda (eeesa mi chola con su nombre power). Ha tenido unos cuantos roces con muchachas por el tema este de “soy un gata en celo que me como a tu flaco”, las cuales las gatas son ellas, claro está; no obstante, más allá de su fuerza bruta nivel Sheena, es buena chica y simpática en todo el sentido de la palabra.

Grimenilda es la típica chica que te toma como amiga si haces algo bueno por ella (me ha salvado de muchas ya que soy maricona totalmente) y aparece en los momentos justos para que te suba el ánimo contándote que Pedrito se chapó a Anita pero Juancito estaba detrás (hechos que simplemente te llegan al huevo ajeno, pero la escuchas). Sin embargo, la muchacha esta se quebró en mi falda nueva tras ampayar tal cual urraco a su flaco “abrazando” a una de sus amigas.

Definir “abrazo” en el idioma femenino es complicado (saca tu post-it y lapicero si eres hombre y apunta). Cuando encuentras a tu pareja, tu Montaner, tu mariachi en pleno abrazo con otra persona es lo que comúnmente puedo clasificar como “que hace ESA canina abrazándolo”. Sí pues, confiamos plenamente en nuestra pareja que la culpamos a la tipa en seguida. Mi Robin qué va a estar abrazando a Martina, jamás, yo confío plenamente en él (he ahí nuestra fase pisada).

Otro caso puede darse como “me está adornando la frente, mujer con huevos”. En este caso, el hombre sale perdiendo y puede presentarse la oportunidad de hacerle la ridícula escena de celos que has practicado unas cuantas veces frente al espejo y, finalmente, largarte. Cachuda pero victoriosa.

A Grimenilda le pasó algo así. Estábamos en plena reunión y me dijo: Mi flaco está conversando con ella. “No, soy celosa” dijo. Yo, como una Bambi en temas de peleas, le dije que era normal, tener amigos es normal! Grimenilda me miró misma Terminator y me dijo: ¿y si me lo está quitando?

¡¿Qué les ocurre?! No ha llegado la oportunidad de que yo sea tan paranoica por eso les pregunto. Las mujeres somos expertas en martirizarnos y los hombres en hacer lo mismo (conozco a unos cuantos que han dicho: Mujer con huevos, está hablando con otro, se me rompe el corazón) pero son las mujeres que se llevan el premio (quiero agradecer a la Academia por mi muestra de inseguridad).

Recuerdo que en esa oportunidad Grimenilda se acercó a su flaco (que también es amigo mío) y le reclamó. La muchacha (amiga mía también y de Grimenilda) — echa, la amiga de todos era yo  se retiró y fue a tomar algo. El flaco miraba a Grimenilda desconcertado y ella no paraba de hablar. Supongo que le estaba reclamando por todos los hechos ocurridos. Y yo, misma analista de Bones, me hacía la loca al mirar disimuladamente.

Para sasconch, al día próximo los dos involucrados (el novio y la chica) me hablaron contándome lo sucedido. Cada uno fiel a su versión, coincidían que el propósito no era hacerle daño a Grimenilda solo de pasar un buen rato amical (no saspende, que yo también me hubiera descuadrado si los veía así) y yo solamente leía lo que me decían. Precio de ser amiga de varias personas involucradas, varias decía.

Lo irónico de todo es que Grimenilda optó por seguir con su flaco y condonar a la muchacha (señora Marta, estoy usando bien el término). La chica, la cual no tenía nada que perder ni mucho menos temer, decidió llevar su vida normalmente. Grimenilda aun cree que le va a serruchar el piso uno de estos días.

Mientras tanto, yo me bacilo con la vida de forever alone que llevo. Me juergueo con precaución de no quedar ebria y analizo cuál de todas mis amigas será una robamaridos.

Les he dejado el enlace en el post anterior sobre la fan page. Puedes encontrar al blog en facebook como: La Chica de Salem. (sapende que ya tiene fan page y nadie le hace bola).

Que tengan una buena semana con dosis extra de café y de almohadas. Las maldetas clases se vienen y uno ya jura que los mayas están cerca.


#tucomentarioesmiprogreso

4 comentarios:

  1. terribles celos de las terribles gatas, muy bueno!

    ResponderEliminar
  2. ay ay sé que se siente tener que escuchar todas las versiones xD askjdhas muy bueno!
    ;D

    ResponderEliminar
  3. 'Caninas' hay en todas partes jajaja , muy buen post Masha! un besoo

    ResponderEliminar