Hombres? A huir!!

Después de unos cuantos meses de ausencia (y digo unos cuantos para que no duela), he decidido seguir con el blog. 

Al principio, decidí abortar el blog del todo. No tenía muchos ánimos por escribir. Digamos que el no lean no incentiva pero, por otro lado, me gusta hacerlo! Así que tendrán de mí, de Proctor y del Reverendo por un tanto tiempo.

Como antesala (y hablando de ellos), quiero aclararles quiénes son y por qué los menciono. En el libro titulado "Las brujas de Salem" los personajes son los ya mencionados y Abigail, una bruja del pueblo. Como nuestro querida serie - no quiero decir chicha - Al Fondo Hay Sitio, ya contaba con una ruqueitor llamada Abigail, evité mencionarla en el blog. Por lo mismo, si les nombro a cualquiera de los personajes, ustedes síganme la corriente. Hacerla de locos de vez en cuando no hace daño.

Por otro lado, quiero aclararles que el único motivo del blog no es culturizarlos, es divertirlos y despertarlos. La lectura es buena, realmente buena. Pero debemos encontrarle una manera divertida para entenderla. No pretendo ser quien les llene de cultura (para eso el Estado nos chupa dinero que según ellos va a la educación), pero sí quien les diga que una loca con cerebro puede fingir y escribir  que le ha pasado todo en  la vida. Es advertencia por ahí no más. Además, ¿qué podría hacer una joven que no ha tenido amigos gays (pero he tenido uno que otro sueño con tener uno así bien happy), no ha sido alcahueltera, se ha tomado un trago de más, no es machista ni tampoco feminista, baila como si le dieran para el pan? Nada, solo compartir mi poca experiencia y meterle ficción. 

Para ya inmiscuirnos en el tema del post de hoy, quiero decir que estoy enamorada de la serie televisiva de otros años, vi a una amiga con un libro feminista, y tengo una amiga que defiende a toda las mujeres por el simple hecho que nosotras parimos y ellos no. Desde que noté el común denominador de las cosas concluí que el motivo de este blog es únicamente para levantarnos/derribarnos el autoestima y mostrarles (a todos hombres y mujeres) que ambos sexos estamos echados para sufrir cómicamente. ¿Cómo así? Sufrir cómicamente es cuando sabemos que nos están haciendo daño pero no lo aceptamos y otros se burlan de nosotros. No le llamo MASOQUISMO porque ya es muy mainstream. JA!

Ahora suenan los tambores de Galdós en la Noche es Mía y digo: Señores, señoritas, tapadas, abiertas, con gracia y sin gracia ... hay tipos de los que tenemos que huir, alejarnos, rociarles Baygon para que se repelen de tu ser como no lo habías visto.

Y es que no es por las actitudes que tomes (tampoco te voy a decir cómo actuar pes) sino que simplemente deber tenerle diez ojos encima. Arriésgate y conócelos CONÓCELOS CONÓCELOS.

El primer joven que será nuestro ejemplo hoy es:

El agarroncito de la fiesta/discoteca: Si has planeado algún día casarte con un marido bien posicionado, que te respete y que obviamente, no ande como abeja tras la miel de otras puedes irte olvidando de este o analizarlo muy bien. El agarroncito es aquel tipo bacán que ha accedido a que su saliva se mezcle con la tuya y generen cuchicheos por todo el local. 

Si lo has conocido de antes puede que la situación esté bien, pero siempre tienes que ir averiguando que ha pasado antes de ti si, por rara ocasión, quieres algo serio.

La clase mencionada, para ser ignorado, debe haber sido configurada por tu cerebro como el peor es nada de la reunión, compromiso, tono. Es aquel por el que rebajas tu autoestima de "me hago la difícil que debo ser siempre" y decides por puro alcohol o despecho (o porque el desgraciao está con una mamasota con más cuerpo que tú) agarrártelo.

Como consejito adicional: Cuida mucho no hacer estas cosas, el papel de "fui su agarre" estará contigo por semanas o días. Aquel papelito puede ser el repelente para aquellos que realmente valgan la pena.

El "la última es la vencida": Algo que puedo destacar de estos chicos es que son realmente perserverantes. Pero resulta que hay quienes se visten de cordero cuando realmente son todos unos lobillos. Los de este tipo pueden incluir frases como "pucha, te invite la vez pasada y ahora no puedo". No señores, es que ustedes deben entender que no es cuando ustedes lo soliciten, sino cuando nosotras también querramos (se le sale lo feminista a la chica).

Considero que  este es por el cual nos estaremos desgarrando después de que el chico que queríamos nos dio el roche o nos dejó. Frases en nuestro CDMV (Cerebro de Mujer Inestable) aparecerán diciendo: Tamare, por qué no le acepté ese pollito (okno, más charm por favor)

El Nicaragua: Señoritas, este joven es el que muchas han de querer expulsar. Si no ha sido stalker es porque entonces no vale nada de lo que tiene. Ni buenas notas, ni trabajo, ni plata (piensa como Teresa o Rubí algunas veces, funciona). Sin embargo, el Nicaragua no accederá si quiera a ser pensado como para ingresar a tu agendita Pascualina para futuras salidas.

Será el protagonista de no recibir ni llamadas, ni cartas, ni mails, ni muros patéticos en facebook o twitter. Aquel pobre hombre que, si bien algunas lo pintan de 10, tú ya tienes listo el botón de "bloquear" de tu twitter y ponerle como "desconectado" en tu chat de facebook.

El sorpresita: Si hay algo que nos gusta a las mujeres (y que nos ha confirmado como babosas en los últimos 2013 años) son aquellas personas que realmente nos traen problemas. El sorpresita es aquel que, en plan afán, se pinta como el chico más lindo del mundo, caballero, detallista y se lleva bien con tus amigas. No obstante, el muy gran hijo de la fruta tiene mujer, hijos, dos caballos, un labrador, una quinta, un departamento en Pimentel y va a la reunión del Rotary Club por ser bisnieto de un socio. Toda una vida armada cuando te vendía ser "el chico humilde (con o sin plata eso no importa) de la calle Inocencia #100 Urb. Te agarré de idiota.

Por otro lado, el sorpresita siempre te llamará caleta. Dirá que seguro está en una reunión de trabajo (o de trabajo de estudios) y que por eso debe colgar rápido. No señores, repito, este tipillo te está mintiendo. Rosita Chu lo afirma.

El Papi dame plata: No sé si les ha pasado, pero qué frustante es saber que tu afán es hijo mimado de casa. Está bien que quiera mucho a su familia (son uno de los puntos básicos que siempre recomiendo seleccionar) pero que no sea el que le pregunta a su mamá si está bien llevar la camisa celeste para cuando salgamos al cine. No. 

La  opinión de tus papás es importante pero no me vengas con que si la chica (o sea yo, o sea tú) es la adecuada para tus papás. Yo no sé que chicha les dirán a sus padres para que, es especial la mamá, nos odie. Señora, créame, no quiero quitarle a su hijo, ponerle un tanto de huevos si estaría bien.

Aún me pregunto si esta clase de chicos les preguntan TODO a su mamá...

Finalmente, no quiero hacerles bullying cibernetico a los hombres y menos cuando no tienen la posibilidad de meterse a editar el post. No obstante, dejo en claro a su defensa que somos las mujeres las tristes obstinadas que creemos que podremos encontrar al hombre perfecto. Aun no abrimos los ojos para notar que, ciertamente, ni siquiera sabemos lo que queremos por tanto prototipo de hombre brindado por la televisión.

Lo único que nos queda, si es que no has de querer vestir santos, es arriesgarnos. Es bueno hacer eso, pero tener bien abiertos los ojos para que chicos como los mencionados, no nos den tremendas sorpresas. Aunque, pensandolo bien, gracias a ellos es que tenemos anécdotas y, gracias a nosotras, ellos pueden alardearse entre sus amigos.